Publicado en Milenio.com
7 de julio de 2011
Ex diputado dijo que el auditor debe ser destituido al habérsele perdido la confianza.
El ex diputado local, Salvador Cosío Gaona, anunció ayer que presentará una demanda civil en contra del legislador del PAN, Héctor Álvarez Contreras, al considerar que le causó daño moral al haberlo denunciado penalmente, luego de que en la LVII Legislatura Cosío firmó un acuerdo en el que se basó la siguiente Legislatura para el pago de casi diez millones de pesos al auditor del estado, Alonso Godoy Pelayo.
En conferencia de prensa, el ex legislador recordó que en 2006 él presidió la Junta de Coordinación Política y la Comisión de Administración y en esa calidad suscribió un oficio para que se pagaran vacaciones no disfrutadas, pero sólo aplicaba en beneficio del personal de base, por lo que se excluía de ese beneficio al auditor, a los directores de área, al secretario general del Congreso y a los diputados.
Si en forma posterior la LVIII Legislatura usó ese acuerdo para hacer los pagos de casi diez millones de pesos al auditor, “esa es otra cosa” y de ello deben responder los diputados, advirtió.
“No tengo nada qué ocultar, yo doy la cara y estoy presentando un escrito ante el procurador de justicia, Tomás Coronado, para que se me dé vista del caso y me proporcione una copia de la denuncia presentada por Héctor Álvarez, porque me voy a defender y las falacias dichas por el panista me causan un daño moral” subrayó.
Cosío Gaona anunció también que si la fiscalía estatal le niega la entrega de una copia de la demanda, él ya presentó un juicio de amparo para obligar a la Procuraduría de Justicia a que se le dé entrada a la denuncia para poder acudir a declarar.
El presidente de la asociación Conciencia Cívica refirió que la agrupación fue de las primeras organizaciones en solicitar la destitución del auditor, luego de que éste adquirió a sobreprecio el predio anexo a la sede de la ASEJ, así como impugnar el proceso de compra-venta de un terreno propiedad de la familia de Alonso Godoy, que vendió a un precio exorbitante a la Universidad de Guadalajara, en Autlán.
Por ello, Cosío Gaona afirmó que Alonso Godoy debe ser destituido del cargo, al habérsele perdido la confianza para ejercer el cargo de fiscalizador de cuentas públicas.
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