Pero parece que no sólo la vamos alcanzar, si no que la vamos a superar y si la tendencia sigue la duplicaremos, lo que ya es innegable es el pésimo manejo de esta pandemia de las autoridades en general.
La urgencia de aplanar la curva aplicando menos pruebas a la población
En lo que personalmente me tocó vivir como sobreviviente de Covid en Zapotlanejo. Le narró brevemente esta odisea y por que habló de la urgencia de aplanar la curva.
Primeramente al acudir al médico en el Servicio Público por falta de recursos económicos con síntomas por todos ya conocidos, el primer diagnóstico fue "tu tienes Dengue". Al persistir las molestias y el deterioro físico, de nuevo al médico y un análisis de sangre surgió otro nuevo diagnóstico influenza estacional, medicamentos, retrovirales y confinamiento a casa.
Pasan los días y continúan más síntomas, de nuevo al médico quien finalmente me aplica la prueba para Coronavirus a la cual salí positivo.
Descubrí en carne propia que no hay medicamento que ayude, solamente el paracetamol de 750, que fue mi compañero durante casi un mes y lo único que me mejoraba.
El miedo de acudir al IMSS a buscar ayuda en los momentos más difíciles. Le soy sincero, no quise ser una estadística más, ya que el 40 por ciento de los que internan no regresasen a sus casas y son incinerados, preferí mejor quedar en la raya pero en mi casa.
Gracias a Dios salí más que otra cosa, lo reconozco que no me tocaba. Al tratar de darle seguimiento a la prueba para verificar si ya no tenía el bicho en mi cuerpo fue una odisea que ya no pude realizar aquí en Zapotlanejo, con la respuesta de que la prueba ya está restringida exclusivamente a pacientes que tengan síntomas y que si en mi caso ya había pasado 14 días de los síntomas, ya me podría reintegrar a la sociedad con las medidas de seguridad.
Justo ahí está la clave por la cual las cifras de nuevos contagios no sube o no se registran. En lo personal cuando yo enfermé, se de primera mano de otras ocho personas estaban contagiadas con síntomas más leves que nunca llegaron a ser estadística.
De ahí pudiera afirmar y confirmar que el manejo de esta pandemia es un verdadero desastre como lo anunció el propio López Gatell, y debería ser la agenda nacional para atender, y que cada día está costando vidas y el manejo que se le está dando desde el Gobierno Federal es un total fracaso, pero aún el ver que una inmensa mayoría de los ciudadanos que a diario demuestran que simplemente les vale un cacahuate si salen contagiados ellos o sus seres queridos, es de dar miedo, porque seguramente el número de contagiados y muertos seguirá creciendo y no se ve para cuando termine.
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