Si ya estás leyendo esto por el encabezado, no es lo que piensas. Este viernes, por fin me tocó subirme a la nueva línea del tren ligero, pero antes hice una prueba de los tiempos.
Tenía que moverme del centro de Zapopan al centro de Guadalajara, y viceversa. Pedí un Uber, justo en la estación de Zapopan Centro a las 2 de la tarde. El conductor tardó unos 7 minutos en poder llegar al punto, y el costo del viaje marcaba 83 pesos.
La aplicación marcaba la mejor ruta, pero el conductor preguntó ¿tomó la ruta o busco algo más rápido? le dije que la manera más rápida de llegar. Ávila Camacho está congestionado porque ahora se les ocurrió pintar las columnas del nuevo tren, y tienen cerrado un carril, de por sí, ya durante 6 años hubo calles y calles cerradas, y ahora que ya está abierta la obra, siguen esos detalles. El trayecto duró alrededor de 35 minutos, más los otros 7 minutos de espera, fueron 42 minutos, y 90 pesos de pago al final, pero ya estaba en el centro. El regreso sería en el tren.
Llegué a la estación Santuario (aunque estaba más en el centro me moví más hacia ese rumbo), y bajando las escalares, son escaleras eléctricas por todos lados, tuve qué preguntarle a los guardias, primero dónde comprar la tarjeta, y en menos de 2 minutos ya la tenía (cuesta 20 pesos y te da un viaje gratis). Le pregunté a otro guardia cuál de todas las escaleras tomar para llegar a Zapopan, y me dijo sigue este piso, y el que sigue, en total, fueron otras dos escaleras hasta llegar a las vías porque este tramo de avenida Alcalde es subterráneo, y se nota que todo es nuevo, la pintura, la tecnología, y pantallas que anuncian en cuánto tiempo llega el siguiente tren.
En 4 minutos ya estaba arriba del vagón y comenzó el recorrido, la mayoría de las personas sí utilizan el cubrebocas, aunque no falta el que subiendo al tren se lo quite, y todavía hay quienes tienen la cara de sorprendido como yo, al ver la zona financiera de avenida Américas. En menos de 10 minutos ya estaba en la estación de Zapopan Centro, y costó menos de 10 pesos.
Sin duda, la línea 3 viene quitar presión a la complicada vialidad, y aunque para muchos esta opción trajo consigo más gastos porque tienen que tomar más camiones, para la inmensa mayoría es un alivio en la movilidad dentro de la gran ciudad de Guadalajara.
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